Antes de que existieran las plazas, los puentes, las oficinas y los grandes edificios el fraccionamiento “Las Ánimas” ya estaba ahí. Los terrenos, más de 1300 hectáreas, fueron adquiridos en el año de 1919, siendo su propietario, Don Justo Fernández, en sus inicios fue terreno de pastoreo, después, gracias a las bondades de la tierra, sirvieron para el cultivo y proceso del café, dando origen a lo que suponemos sea una de las principales empresas cafetaleras de la ciudad, años más tarde, ya situados en 1974, Don Justo F. Fernández proyecta la idea de cambiar el uso de suelo dando origen a lo que años más tarde será uno de los fraccionamientos más bonitos y de mayor tradición en Xalapa. El fraccionamiento “Las Ánimas.”
Años más tarde, varias zonas que formaban parte de la original hacienda de las Ánimas se desarrollaron de manera armónica con el entorno y formando un verdadero polo de desarrollo de la ciudad. Todos los desarrollos inmobiliarios o al menos en su mayoría llevan el apellido “Las Ánimas”, por venir de la misma raíz.
Una de las inmobiliarias con mayor tradición en la ciudad de Xalapa y la región ha sido sin lugar a dudas “Bosque de las Ánimas”, la cual ha sido pilar fundamental en todo el desarrollo al que hacemos alusión.
A la fecha, la zona antigua y la nueva de las ánimas, son una parte fundamental de la ciudad y han sorteado de la mejor manera los problemas derivados del crecimiento de una ciudad como Xalapa, dando paso a grandes desarrollos, dotados de la última tecnología en construcción y respetando el entorno.